S'Almonia

Sobre este proyecto

Superfície: 5.000 m2

Ubicación: Santanyí

Detrás de los muros de piedra de una antigua casa mallorquina se encuentra un jardín que respira historia y, al mismo tiempo, ofrece espacio para nueva vida. Cuando se nos encargó el proyecto, encontramos un lugar detenido en el tiempo, con vestigios de lo que fue un jardín mediterráneo que pedía ser revivido.

Nuestro objetivo fue crear un jardín que permitiera el retiro y la tranquilidad, pero que también satisficiera las necesidades cotidianas de una familia. La entrada está definida por una antigua pista de petanca, que restauramos y enmarcamos con plantas mediterráneas. Particularmente llamativo es el salvia roja, que aporta acentos de color vibrante entre los tonos verdes. Un olivo centenario sobre un pozo ligeramente elevado forma el centro del jardín, acompañado de dos cipreses que aportan estructura y altura.

Desde la entrada, se accede a la veranda principal. Aquí decidimos optar por una plantación ordenada y estructurada con pistachos, westringias y teucrios. Para darle ligereza y movimiento al espacio, lo complementamos con iris azules. En la zona de la terraza, el jardín empieza a cobrar vida. La piscina está rodeada de vegetación de inspiración tropical y sirve como refugio en los días calurosos. Una cocina exterior adyacente invita a largas comidas y relajadas noches al aire libre. La ducha exterior, hecha de piedra natural y azulejos artesanales de Huguet, aporta autenticidad y una refrescante sencillez. El corazón del jardín es un camino de arenisca de Mares, flanqueado por perovskias y olivos jóvenes. Este camino lleva a una tranquila zona con sofás: un lugar para desconectar, charlar o simplemente disfrutar de la naturaleza.